Espacio, nota, tiempo
parte infinita que queda en silencio
volver a sentir, oídos para amar y vivir
seducción vibración
vuelo y soledad
cuerdas caja, razón.
Todo unido al alma
internamente la ilusión
es una erupción volcánica
manos y corazón
técnica llevada a la emoción.
Es cielo, es tarde y noche
ya en la madrugada...
es volver a nacer
en cada nota un giro
donde nada sobra.
Majestuosidad que se deja notar
yo no diré su nombre
¡solo tengo oídos para escuchar!
Pedro Galera. 20-2-2017
Es un poema dedicado a Vicente amigo nuestro referente en la guitarra flamenca, sin duda el mejor de la actualidad, este cordobés ya universal tiene ese genio y ese toque indiscutible
ResponderEliminarque lo hace el máximo exponente después de nuestro Paco De Lucía que nos dejó un legado difícil de igualar.